jueves, 29 de marzo de 2012

                               PROCESIONARIA DE LOS PINOS

   En estas fechas todos los años son comunes los accidentes de las mascotas al contactar con la oruga de los pinos llamada Procesionaria. Este año están siendo especialmente frecuentes estos casos, incluso muy temprano debido a que las condiciones climáticas están facilitando y adelantado la temporada normal de esta oruga.
   Los primeros síntomas que se pueden apreciar es salivación profusa con hinchazón de la cara y muy especialmente la lengua, que sobresale de la boca  (los propietarios dicen que la lengua no le coge en la boca), pudiendo afectar también a los labios, e incluso los ojos, produciendo blefarospasmo
, queratitis (cornea de color azulado, nublada) incluso úlcera corneal, vómitos, etc.
   La causa es una toxina que la oruga lleva en los pelos que recubre el cuerpo, la que desencadena una reacción alérgica, que si no se actúa a tiempo puede conllevar a la necrosis (muerte) de parte de la lengua y posterior pérdida de la zona afectada.
   Lo principal sería evitar la proliferación de nidos de esta oruga en los pinos, para ello hay que cortarlos con cuidado de que no contacte con nuestra piel ni ojos y quemarlos, pero si ya se ha producido el contacto lo principal es lavar con suero la zona afectada ( para retirar la mayor cantidad de toxina posible) y de inmediato administrar corticoides y antihistamínicos para detener la reacción alérgica, que es la que al final va a desencadenar toda la sintomatología de picor, salivación y necrosis lingual.
   Si se ha desarrollado la necrosis lingual debemos administrar también antibióticos sistémicos para controlar la proliferación bacteriana en esos tejidos desvitalizados .